Senderismo en familia por la isla de Tenerife
Acantilados, playas volcánicas, inmensos valles y una riqueza natural única en el mundo. Tenerife es un auténtico paraíso para los amantes de los paseos en la naturaleza. Su extensa red de senderos es apta tanto para los más expertos como para aquellos que solo buscan un plan para disfrutar de un día relajado.
No es de extrañar que desde la isla se realicen eventos tan importantes como el Tenerife Walking Festival, todo un referente mundial para aficionados y expertos. Y es que la isla esconde multitud de rincones y senderos de ensueño en los que perderse durante horas. Si encima has decidido pasar tus vacaciones en familia en el Hotel Suite Villa María, no puedes perder la oportunidad de mostrar lo mejor de la naturaleza de Tenerife a los más pequeños, así que presta atención a estas recomendaciones:
Sus primeros pasos en la naturaleza
Lo primordial a la hora de elegir el mejor sendero con niños es la forma en la que pretendes abarcarlo. Si tus hijos aún no andan y vas a utilizar un portabebés te puedes permitir más licencias con el terreno, aunque debes respetar sus horarios de sueño y comidas. El Parque Nacional del Teide cuenta con multitud de caminos, ideales para despertar los sentidos de los que aún son bebés: la ruta de los almendros en flor, la de los tajinastes en flor -alrededor del mes de mayo- o las famosas siete cañadas son algunos de los más conocidos.
No olvides que, aunque en ese caso no anden, la hidratación es fundamental, por lo que evita siempre los tramos especialmente largos y las horas centrales del día. Asimismo, procura llevar elementos para protegerlos del sol, como gorras o protector para la piel.
Descubriendo Anaga y sus encantos
Sin duda alguna, Anaga es el entorno idóneo para despertar el interés por la naturaleza de los más pequeños. Este Parque Rural reúne unas condiciones únicas en el mundo que dan lugar a multitud de secretos relacionados con la flora, la fauna, el clima y las leyendas populares. La reserva del Pijaral y el Bosque Encantado son los mejores ejemplos de este aura de misterio en torno a la Laurisilva. El camino no es especialmente complicado, aunque para acceder es necesario pedir cita a través de la web del Cabildo de Tenerife.
También en Anaga es posible visitar el famoso Sendero de los Sentidos, un tramo de unos 45 minutos a pie repleto de vegetación y que invita a tocar, oler y sumergirse en los entresijos de todo un ecosistema en perfecto equilibrio. Los más pequeños entenderán por completo la importancia de preservar la naturaleza: una lección vital que les acompañará a lo largo de toda la vida.
Una playa sorprendente, muy cerca del Hotel Suite Villa María
También para esas edades en las que ya son capaces de caminar a su ritmo, pero no abarcan rutas muy complicadas, recomendamos un recorrido desde La Caleta. Esta ruta es la mejor elección para los huéspedes que no quieren abandonar su villa durante mucho tiempo, puesto que se encuentra en la misma localidad y, además, no requiere gran dificultad. Aquellos que se animen a visitarla encontrarán una playa de arenas doradas, aguas turquesas y un ambiente especialmente tranquilo y afable, ideal para disfrutar en familia.
En el interior del volcán
Los volcanes son fundamentales en la esencia canaria y, por regla general, apasionan a los niños. Si tus hijos tienen más de cinco años, te proponemos una excursión que los va a adentrar en el interior de uno de los tubos volcánicos más grandes del mundo: la cueva del viento. Partiendo desde la zona alta de Icod de los Vinos, esta interesante excursión propone un laberíntico recorrido por muchos de los recovecos del tubo, con sus correspondientes peculiaridades.
Si decides hacer esta ruta, no olvides que la temperatura puede bajar considerablemente una vez dentro de la cueva, así que opta siempre por pantalón largo y lleva ropa de abrigo para los niños. De igual forma, el calzado deportivo adecuado será fundamental para evitar resbalones. Al igual que en la ruta del Pijaral, es necesario adquirir la entrada con antelación (son 20€ para adultos no residentes y 8.50€ para niños de entre 5 y 12 años; los residentes adultos pueden acceder por 10€ y los niños por 5€).
Si lo prefieres, también puedes acudir directamente hasta nuestra recepción para que nuestros compañeros comprueben la disponibilidad y te ayuden a sacar el ticket. Estaremos encantados de ayudaros a descubrir las maravillas de Tenerife.
El gran reto: el Barranco del Infierno
Aquellos niños de más de cinco años son perfectamente aptos para recorrer esta Reserva Natural Especial, que parte desde el municipio de Adeje. Con una duración de unas cuatro horas, se trata de un sendero especialmente emocionante para los niños, que podrán ver el agua correr en numerosos rincones del trayecto. El gran colofón llega al final, cuando encontramos una espectacular cascada de 200 metros que preside el barranco.
Este camino está limitado a 300 personas al día con el objetivo de proteger el entorno. En la propia página web del Barranco del Infierno puedes hacer tu reserva por fecha, aunque te recomendamos que evites el invierno por las posibles lluvias.
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